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| Juan Norberto Eléspuru |
El día 19 de enero apareció un bando de Cornelio Saavedra, Jefe Político y Militar de Lima. Trascribo el artículo 3. "Los señores Generales, Jefes y Oficiales del Ejército peruano que se encuentren ocultos en esta capital, podrán permanecer detenidos en sus casas, sin ser molestados, si se presentan al Jefe Político, indicando su residencia. Los señores Generales podrán cumplir con la disposición anterior, dirigiendo una nota al referido Jefe Político, sin que tenga lugar la presentación personal. Los individuos de tropa deberán presentarse igualmente, etc."
En virtud de este bando, algunos Jefes creyeron ineludible responder por escrito, dando sus señas. Ignoro a qué obedece el título con que Ahumada Moreno, en su Colección encarece estas declaraciones, diciendo: "Manifestaciones por escrito de algunos Jefes peruanos, dirigidas a las autoridades de Lima, para no tomar más las armas contra Chile, en la presente guerra".
Entre estos figuran altas personalidades peruanas, como el General Eléspuru, a quien acabo de aludir, y algunos Coroneles que ya no existen, siendo uno de los más conocidos, entre los desaparecidos, el Coronel Frías, cuya actuación. en contra de Chile y en defensa de la integridad nacional, ha sido notable en época posterior a la difamación enemiga.
No pretendo entrar en controversia alguna, ni esta obra tiene tal índole, sino exclusivamente, decir la verdad, por amarga que sea. Deseosa de desvirtuar esa grotesca calumnia, con la que se trata de mancillar la dignidad y altivez de nuestro ejército, he recurrido al General don Juan Norberto Eléspuru, quien aparece, en la lista de la Colección de Ahumada Moreno, entre otros ilustres Jefes, como habiendo firmado el no volver a tomar armas contra Chile. Este respetable militar, niega semejante hecho, y al contrario, me autoriza para que dé a la publicidad su negativa.
El General Eléspuru dice:
"Estuve preso en el buque de guerra "Angamos", que viajaba por las costas del Perú y Chile, sin haber llegado a desembarcar en lugar alguno. El General Lynch, me ofreció la libertad si firmaba no volver a tomar armas contra Chile; mi respuesta fué: "En ese caso prefiero continuar prisionero", a lo que el General Lynch respondió, dándome la mano: "Es U. un caballero", poniéndome en libertad".
El conocido y valeroso General Canevaro, que en época posterior ha figurado como Vice-Presidente de la República, también aparece en la mencionada lista y me autoriza a desmentir, como una impostura, el haber firmado documento alguno y aún el haber estado prisionero.
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Cáceres Moreno, Zoila. "La campaña de la Breña: memorias del mariscal del Perú, D. Andrés A. Cáceres". Tomo I. Lima, 1921.
Saludos
Jonatan Saona
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