Este benemérito ciudadano que en diversas oportunidades prestó muy útiles servicios al país, nació en la villa de Cañete el 3 de Diciembre de 1850. Efectuó sus estudios en el Colegio Nacional de Nuestra Señora de Guadalupe, y llevado de su afición a las armas, como muchos jóvenes de aquella época, ingresó voluntariamente al Ejército Nacional para hacer la campaña de la Restauración a raíz del conflicto con España, tomando parte poco después en el glorioso combate del 2 de Mayo de 1866, como teniente de artillería en la batería Zepita. Alejado del servicio militar en 1868, se dedicó a la vida de los negocios, logrando conquistarse espectable situación económica en el departamento de Arequipa, donde ocupó elevados cargos, como entre otros el de Alcalde de la ciudad de Mollendo.
Cuando estalló la guerra con Chile el 5 de Abril de 1879, el señor Román se encontraba en Tacna poniendo al servicio de la Patria los recursos económicos de que disponía; organizando además, en Tacna y Arica, suscriciones públicas para el fondo de guerra, y formando parte integrante de la Junta encargada de custodiar dichas erogaciones. Tomó parte en los bombardeos efectuados en Arica, contándolo por esa época El Comercio en el rol de sus más distinguidos y arriesgados corresponsales. Muchas de las crónicas de aquellas acciones de guerra en Arica, fueron rubricadas por el señor Román, que formaba en las filas de los combatientes. En Tacna asistió a la batalla de Campo de la Alianza, destacando por su valor y patriotismo al lado de su jefe inmediato el General La Torre.
Terminada la contienda se radicó en Mollendo, dedicando, sus mejores actividades al progreso de ese puerto, en donde logró la reconstrucción del templo que había sufrido grandemente a consecuencia de la guerra.
Don Francisco Román ingresó después al servicio público, ocupando altos puestos fiscales, en los cuales puso de manifiesto su competencia en los asuntos referentes a hacienda y aduanas. Posteriormente fue representante a Congreso, en el desempeño de cuyas funciones parlamentarias y en la Presidencia de las Comisiones a que perteneció, dejó múltiples iniciativas y proyectos de ley sobre finanzas y rentas nacionales. En 1916 fue elegido Presidente de la Sociedad Fundadores de la Independencia, tocándole en tal carácter presidir las ceremonias del cincuentenario de la gloriosa efemérides del 2 de Mayo, que alcanzaron especial relieve tanto en Lima como en todo el Perú, especialmente en los departamentos de Huánuco, Cajamarca, Arequipa y en la provincia constitucional del Callao. Al año siguiente, se publicó bajo su dirección, un interesante libro con la reseña histórica y documentada de aquel gran acontecimiento sudamericano y de las fiestas del ya dicho Cincuentenario, libro que constituye una verdadera obra de consulta y de inestimable valor bibliográfico.
Fue electo diputado por Cañete, su ciudad natal, no habiéndose incorporado a su Cámara por causa de la revolución de 1892. Desempeñó el cargo de contador y administrador de la aduana de Mollendo el año de 1890. Ejerció la Secretaria privada del Presidente de la República, General Remigio Morales Bermúdez; fue concejal de la Municipalidad de Lima, Director de la Aduana del Callao y Vista de primera de la misma; formó parte de la Junta departamental del Callao en Enero de 1891; en el mismo año fue nombrado por la Municipalidad del puerto, con el fin de gestionar la erección del monumento al glorioso Almirante Miguel Grau. Elegido diputado por la provincia de Tarata en 1912, su labor parlamentaria y el alto espíritu patriótico que inspiró todos sus actos, constan en los respectivos Diarios de Debates de dicha época, siendo miembro de la Comisión de Hacienda y Presidente de la de Aduanas de esa rama legislativa.
El señor Román falleció el 19 de Junio a los 78 años de edad, siendo diputado por Tarata y Presidente de la Sociedad Fundadores de la Independencia, tributándosele por disposición gubernativa los honores que merecía por su vida limpia, patriótica y abnegada.
El señor Román que había contraído matrimonio con la respetable dama tacneña Inés Arias Soto, fue hijo del señor Juan Román Sánchez y de la señora Josefa Galindo Abril, y padre de los señores Francisco de Paula Román, Mayor Armando Román y Luis Román, fallecidos los dos últimos; de las señoras Benigna Román de la Fuente Chávez, María Luisa Román de García Monterroso y Elvira Román de Stagnaro Ugarriza, y de las señoritas Elena, Rosa y Sara Román Aras.
Al frente de los destinos de la Benemérita Sociedad, el señor Román demostró inusitada actividad consiguiendo del Gobierno de 1916 toda clase de facilidades para el logro de la buena marcha de la Institución confiada a su cargo. Fue así como consiguió se le diese un nuevo local a la Sociedad, por cuanto el que anteriormente ocupaba resultó demolido para ampliar las obras del nuevo Palacio Legislativo. El señor Román se multiplicó pues en esta oportunidad y logró que se le favoreciese con un subsidio para atender al insignificante presupuesto de que por entonces disfrutaba la Institución, por cuyo progreso hizo cuanto pudo dejando su nombre muy bien puesto en los fastos de la Benemérita Sociedad.
Vinicius
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"Reseña Histórica de la Benemérita Sociedad Fundadores de la Independencia, Vencedores el 2 de mayo de 1866 y Defensores Calificados de la Patria. En el primer centenario de su fundación". Lima, 1957.
Saludos
Jonatan Saona
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