Nació en Lima el 5 de enero de 1860. Fueron sus padres don Juan Vila y doña Manuela Liseras.
Hizo sus estudios de instrucción primaria y media en el Callao. La primera en la Escuela Municipal, que dirigía el señor Montejo y la segunda en el colegio "Dos de Mayo", que patrocinaba el Concejo Departamental de ese puerto y en el que dictó el curso de Historia Eclesiástica el año 1878.
Ingresó a la Universidad matriculándose en la Facultad de Letras el año 1877 y en la de Ciencias Políticas y Administrativas el año siguiente. Su actuación universitaria constituye una serie de triunfos. El año 1877 obtuvo en el primer año de la Facultad de Letras el premio de Estética y entró en el sorteo del de Literatura Castellana.
Ese mismo año obtuvo en la Facultad de Jurisprudencia los premios menores del primer año. El año 78, en el segundo año de Letras, entró en el sorteo del primer premio de Historia de la Filosofía y obtuvo el premio de Historia de la Civilización Peruana. Ese mismo año obtuvo en la Facultad de Ciencias Políticas y Administrativas, el segundo premio del de Derecho Constitucional y entró en el segundo premio del de Derecho Internacional.
El año 1880 obtuvo en la Facultad de Jurisprudencia el segundo premio de Derecho Administrativo.
Los años de 1879 y 1880 había dejado de estudiar en la Facultad de Ciencias Políticas; pero se volvió a matricular en ella el año siguiente, como consta en el libro de matrículas de dicha Facultad (página 16), obteniendo la contenta de bachiller y entró en el sorteo de una mención honrosa que obtuvo don Augusto Villagarcía.
El indicado año (1881) obtuvo en la Facultad de Jurisprudencia los primeros premios en los cursos de Derechos Especiales y de Práctica Forense (1ª asignatura). Figuró también como alumno distinguido en
el curso de Derecho Marítimo. El año 1882, cursando tercer año de la Facultad de Ciencias Políticas, obtuvo los primeros premios en los cursos de Derecho Internacional Privado y Derecho Diplomático e Historia de los tratados. En este año fué nombrado catedrático adjunto de Literatura Castellana, en la Facultad de Letras.
Se graduó de bachiller, licenciado y doctor en esta última Facultad el año 1879, realizándose este último grado el 13 de setiembre. Al finalizar el año 1882 graduóse de bachiller en Jurisprudencia, habiendo hecho su práctica forense, durante la ocupación chilena, en el famoso estudio del doctor de la Lama.
Antes de la entrada a la capital del ejército enemigo se dirigió al departamento de Lambayeque (enero de 1881), donde se encontraba su familia, en cuyo lugar ocupó el cargo de secretario del prefecto, coronel Relaize; pero una vez que las fuerzas chilenas desembarcaron en Eten y se retiró la autoridad política hacia el interior, Vila regresó a Lima, donde el gobierno de García Calderón había conseguido que funcionaran las clases universitarias en distintos locales , por estar el pueblo ocupado por fuerzas de Chile. El año 1882, concluída su carrera, creyó el padre de Vila, imposible se graduase de abogado en esta capital, y a fin de que lo hiciera ante la corte de Huaraz, lo envió a esa ciudad. Llegado a esta, en los primeros días del año 1883 fué nombrado secretario de la jefatura del ejército del norte, siendo comandante de esas fuerzas el coronel Recabarren. Las obligaciones de su cargo no impidieron que el día 19 de Mayo del indicado año, obtuviese de la corte el título de abogado.
Poco tiempo después fué nombrado comisario general del ejército del norte, con el grado de comandante.
Por entonces, las fuerzas peruanas al mando del general Cáceres se acercaban al departamento de Ancash, perseguidas por el enemigo, al mismo tiempo que nuevas fuerzas chilenas salían de Trujillo, para cortar la retirada a las primeras. El encuentro se realizó en Huamachuco el 13 de julio de 1883, siendo fatal para la suerte de nuestras armas.
Emiliano Vila, deseando tomar parte activa en la batalla solicitó del comando se le otorgase el mando de una compañía, a cuyo frente murió en el asalto del cerro Sazón.
****************
Carbajal y Seminario, Francisco. "La Universidad de Lima y la Guerra del Pacífico". Lima, 1929.
Saludos
Jonatan Saona
Otro joven brillante, sacrificado en la hora undécima por cumplir un compromiso de honor ineludible, cual fue el juramento de vencer o morir prestado solo días antes de Huamachuco.
ResponderBorrarSobrecoge la fortaleza de espíritu con que la juventud ilustrada de ambos adversarios enfrentó la muerte en batalla sin vacilaciones. Las listas son largas, y al revisar someramente los currículae de los caídos, la constancia de estudios especializados, títulos y posgrados que ostentaban esos jóvenes, así como de tempranos triunfos empresariales, el respeto y admiración por esa generación se engrandece.