Marco Aurelio Arriagada, militar chileno en 1879 había sido designado como Comandante de la Plaza de Antofagasta. Cornelio Saavedra, militar y político chileno, dirigió la llamada Pacificación de la Araucanía, ministro de guerra y marina, durante la guerra fue nombrado Inspector Delegado del Ejército de Operaciones en Perú.
Arriagada menciona lo ocurrido en el combate del Tambillo (06 de diciembre de 1879) donde aproximadamente 70 bolivianos al mando del coronel Rufino Carrasco derrotaron a un piquete de 25 granaderos a caballo, y la precaución que ahora deben tomar frente a un posible encuentro con los bolivianos.
"Antofagasta, 1º de febrero de 1880.
S. Don C. Saavedra.
Santiago.
Mui estimado S. y amigo:
Ayer recibí su grata del 23 del mes que espiró, la que me a (sic) proporcionado el gusto de saber de Ud.; no obstante de que por ella veo que no se halla bien de salud.
Yo, felizmente me conservo bueno i dispuesto a servir a mi patria en la medida de mis débiles fuerzas.
Por acá el trabajo es incesante, además de la responsabilidad. Son muchos los negocios militares que llegan a esta plaza, y todos hai que resolverlos sin pérdida de tiempo.
Los bolivianos han mantenido en alarma a todo el interior con motivo del destrozo que hicieron en el piquete de 25 Granaderos que guarnecían a San Pedro de Atacama, cuyo suceso tuvo lugar tres días antes de que yo llegase a este puerto.
Ahora aquella plaza está suficientemente guarnecida para evitar toda sorpresa.
En cuanto a la posibilidad de que fuerzas organizadas pudieran atacarnos por el interior, lo creo casi imposible por los obstáculos que presenta el desierto, i dado caso que pudiese vencerlos el enemigo no podría escapar de la derrota completa a nuestros primeros tiros.
Este es el juicio que me e (sic) formado de ese enemigo que se dice organizarse en número crecido en el sur de Bolivia con el objeto de reivindicar a viva fuerza este litoral. ¡Veremos si son capaces de algo los señores Cuicos!
La catástrofe ocurrida en la artillería me tiene hasta ahora preocupado, sin embargo de haber salvado mi familia, cuyo aviso telegráfico tuvo Ud. la bondad de darme oportunamente. Aún no sé los pormenores. Espero con ansias el vapor para conocerlos i recibir carta de Elena.
Presumo que toda su estimable familia esté buena. Sírvase saludar a la señora Dorotea, y Ud. disponer de su consecuente amigo que le desea toda felicidad.
M. Aurelio Arriagada."
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Texto de la carta, gentileza de Agustín Cabré Rufatt
Saludos
Jonatan Saona
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