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| Dolores Cabero |
Cuando la corbeta "La Argentina" arribó en 1889 al Callao, el teniente de fragata Manuel A. Barraza (quien había brindado por Miguel Grau en Valparaíso) pudo reunirse con Dolores Cabero, viuda del héroe peruano y pudo conocer a sus menores hijos.
Allí la digna señora le entrega como obsequio un reloj que había pertenecido al héroe de Angamos.
Estas noticias las podemos leer en el diario "La Bolsa" de Arequipa, en su edición del miércoles 20 de febrero de 1889:
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"BOLETÍN DE NOTICIAS
Resumen de las que comunican los últimos diarios del norte.
—Habiendo manifestado el marino argentino señor Manuel A. Barraza, su deseo de presentar sus respetos á la señora viuda del Contra-Almirante Grau, el señor Secretario de la Legación Argentina, lo condujo anoche á casa de esta digna señora que vino exprofeso de su residencia en el campo para recibir tan satisfactoria visita.
En la casa, después de la respetuosa presentación y cambio de las mas afectuosas palabras, la señora invitó al señor Barraza á colocarse frente al retrato, de cuerpo entero, que representa al Contra-Almirante y allí, en actitud por demás solemne, obsequió al señor Barraza el reloj que el héroe de Angamos, llevaba el 8 de Octubre y que por hallarse un tanto descompuesto entónces, no estaba en el bolsillo de ese noble marino.
Dicho reloj que fué mandado á Europa para su compostura, llegó á manos de la viuda, pocos días antes del arribo al Callao de la corbeta “Argentina".
El señor Barraza aceptando tan significativo presente, dijo que aunque no era merecedor á él la conservaría siempre con orgullo.
Algunos otros señores marinos de “La Argentina" fueron también presentados anoche poco después del señor Barraza, á la viuda del Contra-Almirante y la velada fué pasada en la mas franca cordialidad."
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"INTERIOR.
LIMA
Miguel Grau.
La respetable viuda de nuestro inmortal marino reside en una casa de campo cerca de esta ciudad, allí pasa el verano acompañada de sus tiernos hijos, herederos del nombre glorioso y prendas de estimada la Nación.
Al saber que venía á Lima el caballero Barraza, de la marina Argentina, se trasladó á esta capital donde debía recibir su visita, pues había anticipadamente enviado á saludarle á bordo.
Hé aquí las personas presentes en casa de la señora de Grau: señor Secretario de la Legación Argentina Yeckman; señor Lavalle, acaudalado argentino residente hoy en Lima; coronel Melchor Velarde, Emilio Armedero, S. Soyer y señores Masías.
Se hallaban presentes, entre los miembros de la familia, la señora hermana de nuestro Contra-almirante y la señora Mercedes Cabero de Soyer.
Los niños del ilustre americano formaban un grupo en este órden: Ricardo, Rafael, Carlos, Miguel, María Luz y Victoria Grau.
El señor Barraza estaba acompañado de los señores García Mansilla y Leopoldo Perez.
Puede decirse que presidía el acto un magnífico retrato del contra-almirante.
Después de los saludos de afecto, se manifestó al señor Barraza el deseo que había tenido la señora de saludar personalmente al joven marino que honrára el nombre de su esposo; y uno de los niños puso en sus manos un cronómetro, diciéndole que, como testimonio de gratitud y recuerdo de cariño y simpatía, obsequiaba esa prenda de su padre que había sido conservada, después que este hubo cumplido su deber á bordo del Huáscar.
El señor Barraza contestó que no se creía merecedor de tan señalada distinción: que había cumplido, honrando la memoria de Grau, un deber de compañerismo y que cómo americano tributó también justo homenaje á su gloria, que es la de un mundo; que aceptaba el valioso obsequio como prenda de un afecto que será imperecedero.
Se les mostró á los marinos argentinos, los tres albums que habían obsequiado á Grau en la República Argentina: el uno de Buenos Aires, el otro de Santa Fé y el tercero de Mendoza.
En el de Buenos Aires pusieron su nombre los tres señores de la "Arjentina.”
Vieron los objetos ó prendas que conservaba la familia del Contraalmirante y permanecieron en casa de la señora viuda de Grau hasta las doce de la noche.
Esta manifestación sencilla y sin fórmula, franca y sincera, será la que mas sea recordada, estamos seguros, por el señor Barraza.
El cronómetro obsequiado, á causa del choque que sufrió al ser destrozado el cuerpo de Grau, había quedado descompuesto y últimamente fué enviado á Europa á casa del fabricante para su compostura."
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Saludos
Jonatan Saona
Estimado Jonatan: Tu blog es magnífico. Soy seguidor desde hace mucho tiempo y aprecio cada una de tus post. Un aplauso. Mi única sugerencia es que incluyas la fecha: día, mes y año que se publicó la nota original.
ResponderBorrarHola José, acabo de poner el año al inicio. No lo había puesto antes porque este post es una continuación de otros que tratan sobre la corbeta "La Argentina" en Chile y Perú, y había aclarado antes que es en 1889, gracias por la observación.
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