"Nuestros Héroes
Acaba de cumplirse un acto de justicia ineludible que tiene que haber sido visto con ojos de sincero agrado por todos los patriotas que derramaron su sangre y batallaron denodadamente hasta en los últimos baluartes defensores en la guerra nacional á que nos provocara Chile hace treinta años.
Ese póstumo acto de justicia ha sido la traslación á la Cripta de nuestros héroes, de los restos del histórico cura Mendoza de Huaripampa, alma y resorte del movimiento provincial que mantuvo al enemigo en cuitas y temores durante los muchos meses que precedieron á su parcial dominio.
La historia y la leyenda han pintado ya sólidamente la figura del cura Mendoza. Joven, muy joven, consagrado por entero á su ministerio en aquel valiente pueblo, llegó el día en que la desdicha del país fué expuesta ante sus ojos; y sin trepidar un instante, sin vacilación alguna, colgó el hábito sagrado y empuñó el fusil de los patriotas poniéndose al frente de una pequeña partida que mantuvo en zozobra por muchos días el espíritu audaz del invasor.
Cayó al fin el párroco Mendoza, como en aquellas épocas cayeron tantos. Pero su heróico ejemplo fué una proclama de resistencia y sirvió para que el nombre de Huaripampa, como más tarde el de Huamachuco, marcaran una fecha en la historia de aquella época."
El cráneo del heroico cura Mendoza
(De fotografía tomada en Jauja en vísperas de la traslación a Lima de los restos. Puede distinguirse aún la hendidura del hachazo que recibiera)
***********
Revista "Variedades". Año VII núm. 172. Lima, 17 de junio de 1911.
Saludos
Jonatan Saona
No hay comentarios.:
Publicar un comentario