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| Aurelio García y García |
"Privada — Señor don Carlos Paz Soldán.
— Su casa, Lima, noviembre 19 de 1879.
— Estimado señor mío y amigo:
— En la interesante "Revista Peruana" que Ud. tan acertadamente edita, se están publicando desde hace tiempo importantes artículos anónimos que llevan por lema "Memorandum para la historia de la guerra declarada por Chile a Bolivia y al Perú". Como la mente de ese escritor, que revela gran inteligencia y laboriosidad no puede ser otra que establecer fuentes de verdad a donde nuestros futuros historiadores ocurran más tarde en solicitud de datos precisos e imparciales: me permitirá usted que por su órgano, ya que no me ha sido dado hacerlo de otra manera, llame la atención del citado escritor acerca de ciertos olvidos o equivocadas apreciaciones cuya continuación podría apartarlo sin querer, del noble espíritu que la dirige.
La captura del transporte de guerra chileno "Rímac" con el regimiento "Yungay" a bordo y el valioso cargamento que portaba, fué acto único y exclusivo de la Corbeta "Unión"; ni podría ser de otra manera tratándose de un vapor cuyo andar constante durante las cuatro horas que se emplearon en la caza, fué de trece a trece y media millas por hora, siendo así que la velocidad máxima del "Huáscar" en las mejores circunstancias jamás excedió de once millas a la hora. Cuando este ultimo buque llegó al costado del "Rímac" ya parado, estaban prisioneros a bordo de la "Unión", el capitán de fragata don Ignacio L. Gana, comandante del transporte, y su primer oficial: además, y esto es muy notable que no haya merecido el menor recuerdo, el pabellón chileno que llevaba en la driza de popa el "Rímac", único del enemigo que hasta ahora ha sido tomado: todo remitido por mi ayudante el teniente 2°. don Felipe de la Torre Bueno a quien comisioné para tomar posesión a nombre de la República de la nave rendida. — (Parte oficial al director de la guerra fechado en Arica el 25 de Julio de 1879).
Consecuencia de la anterior captura, fué la comisión que recibí para dirigirme con la "Unión" al estrecho de Magallanes, por donde según la carta hallada a bordo del "Rímac", debía pasar un vapor cargado de armas para el enemigo; sin determinarse fecha, nombre o bandera del buque ni dato alguno que pudiera dar luz en la materia. Zarpé no obstante de Arica con la "Unión" el 31 de julio, a ejecutar ese dilatado viaje de cinco mil y más millas, en la estación de invierno, por regiones siempre tormentosas; sin tener el aparejo completo por haber dejado en el Callao los masteleros y vergas mayores y de mesana; careciendo del carbón indispensable para tan larga travesía, desde que no existia para nosotros puerto franco de recalada, ni los depósitos de la corbeta tienen más capacidad que para la mitad de esa distancia: y por último, sin que su tripulación tuviera la ropa de abrigo y de agua indispensables en esas altas latitudes glaciales. Ninguno de tan fundados inconvenientes fué obstáculo para llevar a término la comisión de que me ocupo, y recorriendo de norte a sur en toda extensión la costa enemiga. embocó la "Unión" el 13 de agosto por entre las nieves de un crudísimo y tempestuoso invierno la entrada occidental de Magallanes.
El 16 fondeaba la corbeta en la rada chilena de Punta Arenas dentro del mismo estrecho apoderándose allí de cien toneladas de carbón del enemigo y obligando a las autoridades locales el que permitiesen a los comerciantes el suministro de provisiones frescas a la corbeta. Como por noticias fidedignas tomadas aqui se supo que hacia doce días que el vapor inglés "Greneleg", conductor de las armas, había cruzado para el Pacifico, emprendió el 18 el viaje de regreso conforme a instrucciones. Este viaje que en su mayor parte se hizo a la vela por deficiencia de carbón. tuvo siempre a la "Unión" a las inmediaciones de la costa de Chile, que recorrió nuevamente de sur a norte hasta fondear sin la menor novedad en Arica el 14 de setiembre, burlando al "Cochrane", "O'Higgins" y "Loa", que habían ido a perseguirla por el sur y al "Blanco" y otro buque enemigo que por muchos dias estuvo aguardándola entre Iquitos y Sama. Este viaje que honraría cualquiera marina del mundo, que tanto humilló a los chilenos y que es el más dilatado y penoso de la actual campaña, no ha dado mérito para que el ya memorado escritor lo consigne ni aun como referencia cronológica de los sucesos (Parte oficial al director de la guerra, fechado en Arica el 14 de setiembre de 1879).
Silencio profundo se guarda igualmente en las publicaciones referidas acerca de la arriesgadísima feliz expedición que realicé en la misma corbeta "Unión" zarpando del Callao para Arica convoyando a nuestro transporte. "Rímac" el 26 de setiembre y conduciendo a la división "Bustamante", compuesta de los batallones "Ayacucho 3°.", "Provisional de Lima", y "Pasco", fuertes de mil quinientos hombres. Con abundante parque y útiles de guerra de todo género. Esto se hizo cuando los diecinueve buque que forman la armada chilena se ncontraban cruzando y en acecho sobre el litoral del Sur (Parte oficial al director de la guerra, fechado en Arica el 30 de setiembre de 1879)
Aunque juntos sobre la costa de Chile, el Huáscar y la Unión, la captura de la goleta "Coquimbo" se efectuó por la "Unión" en Sama y el capitán de presa, teniente 2°. don Armando Larrea pertenece a la dotación de la corbeta. (Parte oficial al director de la guerra, fechado en Anca el 9 de octubre de 1879).
Buscar en los apasionados y siempre odiosos conceptos de la prensa chilena fundamentos o datos para juzgar los acontecimientos del 8 de octubre en la costa de Mejillones, es apartarse voluntariamente de todas las reglas de sano criterio. Ese algo que no hizo la "Unión" en ese dia fué precisamente lo que ha exaltado hasta la hidrofobia a esos impúdicos escritores. Pasar ese buque con su bandera desplegada a través de toda una escuadra poderosísima, burlándose de la celada tendida, es algo que jamás perdonará la petulancia chilena. Y esto, por quién? Por un buque falto de cañones a proa para cazar y a popa para retirada, lo que obliga a batirse únicamente de costado; por un buque cuyas calderas se hallan cuatro y medio pies sobre la línea de agua, en una extensión de cuarenta y cinco pies de popa a proa por cada costado; por un buque cuyos proyectiles huecos de a setenta y llenos de grietas revientan a la boca de los cañones; por un buque que aun lleva montadas sus piezas de la manera más primitiva, morosa e imperfecta; y por último, cuando lo perseguían escalonados con intermedios de minutos en la distancia, tres buques armados con artillería rayada de Amstrong, de 150, 115 y 70. Habérseles escapado de las manos un triunfo tan fácil y completo sobre el que tantas ilusiones se formaron, es algo con lo que nunca podrán conformarse los que sólo saber desplegar bríos en los lances sobre seguro. Pero el librar así un buque de una de las situaciones más difíciles que es posible atravesar en la guerra marítima, cumpliendo al mismo tiempo las instrucciones recibidas, ha sido sin embargo materia de las más ligeras y acres censuras. Que ¿no reflexiona que un buque sencillo de madera y de las defectuosas condiciones de armamentos de la "Unión", era imposible diese la más leve ayuda al "Huáscar" en su obligado combate? ¿No se ve que a haber podido escapar el monitor, lo habría hecho como lo procuró hasta el último momento en que fué acosado sobre tierra?
¿O se quiere acaso hacer caso omiso de la estrategia naval estableciendo que en adelante es deber de un buque caer torpemente en las emboscadas que se urdan con elementos que hacen imposible el destruir o causar daño al enemigo; únicos objetos de la guerra?
Crea usted en la sinceridad de mis palabras y aceptando el noble fin que las dicta, reciba los sentimientos de amistad de su afectísimo seguro servidor.
— (Firmado) Aurelio García y García
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Revista de la Sociedad de Fundadores de la Independencia, Vencedores del 2 de mayo de 1866 y Defensores calificados de la Patria. Año II. n° 6. Enero-Marzo 1944.
Saludos
Jonatan Saona
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