Domingo Galdamez

Domingo Galdamez López

GALDAMEZ LÓPEZ, Domingo.

— Comerciante, residente en la Comuna de Providencia — Santiago.

— Nació en Putaendo, el año 1863.— Sus padres fueron, don Pascual Galdamez, de oficio zapatero y doña Juaua López. A la escuela pudo asistir apenas unos cuantos meses, habiendo perdido á sus padres cuando tenía 10 años. A esa edad tuvo que principiar á luchar para vivir, ocupóse primeramente, en un negocio de abarrotes de su pueblo natal y después pasó a la casa Zamora en Catemu.

Allí se encontraba Domingo cuando en 1879 se declaró la guerra del Pacífico, cuando en Chile, sin hacerse servicio militar obligatorio, se improvisaban batallones en todas las provincias acudiendo a los cuarteles en tropel, hombres jóvenes y hasta los muchachos menores de edad. El niño Galdamez que tenía 16 años logró meterse entre los soldados del batallón Aconcagua y marchar contento y risueño en defensa de la patria.

La historia cuenta la actuación de ese batallón en las batallas de Chorrillos y Miraflores; y, al recordarla, hace pensar el papel que desempeñaría el valiente muchacho Domingo Galdamez en esas gloriosas batallas que le dieron á Chile la preponderancia en el Pacifico.

Las crónicas guerreras y la historia, en lo que se refiere al batallón Aconcagua, cuentan que después de Lima, hizo la persecución al valiente peruano, el general Cáceres; se internó también en las sierras del Perú, encontrándose en la campaña de Arequipa que dirijía el general Montero; estuvo además de guarnición en San Pedro de Atacama. El soldado chileno Domingo Galdamez se encontró en todas esas refriegas y campañas regresando á Chile en su batallón en Julio de 1884. Durante seis años estuvo en los campos de batalla y llegó á su patria, victorioso, no ya como niño, sino siendo un gallardo joven de 21 años de edad, con su guapa gineta de sarjento la que conserva hasta hoy con orgullo y con respeto.

Se vino á Santiago y al poco tiempo se empleó en el establecimiento Concha y Toro en el mineral de Las Condes. Fué contraído al trabajo, juicioso, respetuoso con sus superiores y esto, juntamente con su buen carácter, le valió un bienestar y rápido progreso.

Pensó que el más honesto y mejor modo de vida es el del matrimonio y en 1886, á los 23 años, se casó con la señorita Corina Robles, de cuyo enlace hay á la fecha —Diciembre 1907— cuatro hijos llamados Domingo 2°, Alfredo, Isidoro y Juana. La familia Galdamez constituye un hogar feliz, establecido don Domingo en Providencia desde el año 1900.

La vida social del señor Galdamez, no ha sido repartida en diferentes instituciones, haciendo poca cosa en cada una de ellas, como lo hacen muchos, sino que todo su pensar, todo su entusiasmo y su tiempo, después de su trabajo, lo ha dedicado á la Sociedad de Veteranos del 79, donde se incorporó el 1° de Febrero de 1903. Es socio jubilado con 12 años de servicio.

En 1904 tuvo el socio veterano una idea feliz para la institución; un grandioso pensamiento, que ha repartido gran bienestar a muchos y que será un recuerdo para la historia que honrará la memoria de don Domingo Galdamez. Nos referimos al Albergue de los Veteranos que hoy es una hermosa propiedad avaluada en 300 mil pesos. La idea fué de establecer una gran casa para asilar allí á los inválidos de la guerra, darles un hogar y, si es posible fuera, también la mantención. El problema era de difícil solución, pero don Domingo se propuso iniciarlo á toda costa, y junto con don Pedro Pascual Muñoz, trabajó denodadamente hasta llegar a realizar su gran pensamiento. El año 1904, la sociedad sesionaba en un salón del Mercado de San Diego, local que lo había conseguido gratuitamente con el Alcalde de entonces señor Arce, el regidor municipal don Diego Escanilla. El señor Galdamez ese mismo año inició los primeros pasos ante, el Gobierno para la fundación del Albergue. El Ministro señor A. Bascuñan Santa María, le ofreció su cooperación y gestionar una subvención y la adquisición de un buen local siempre que tuvieran aunque fuera un pequeño bien raíz.

Sin vacilación y con toda voluntad don Domingo Galdamez hipotecó su propiedad y compró un sitio por valor de 3,500 pesos quedando inaugurado solemnemente el Albergue de los Veteranos, el 17 de Septiembre de 1905.

Para este acto se invitó á muchas personalidades del Gobierno: ministros, senadores y diputados. Desde entonces no descansó don Domingo Galdamez y mediante la cooperación de los diputados demócratas señores Malaquías Concha y Artemio Gutiérrez, se consiguió una primera subvención de 20,000 pesos, con lo cual se compró la propiedad en que hoy está el Albergue y la sociedad tiene los salones, sostiene una escuela nocturna, y da albergue a varias familias de veteranos de la guerra.

Esta grandiosa y benéfica obra del Albergue ha sido ideada, realizada y sostenida por ciudadanos demócratas; es obra de la democracia. Es necesario que quede de esto constancia para los que utilicen esos beneficios, para recuerdo de los que se educan en esa escuela y para memoria de la futura generación.

Don Domingo Galdamez ocupó en el primer directorio del Albergue el puesto de Vicepresidente.

En la actualidad, hoy mismo, Diciembre de 1907, se haya preocupado de conseguir que una vez en el año se haga una colecta pública para amparar a los ancianos del Albergue, que hicieron en 1879 la campaña del Perú y Bolivia. Se le daría el nombre: el día de los veteranos.

Ha sido en varios períodos presidente de la comisión que atiende la escuela nocturna.

En política, la vida de don Domingo Galdamez ha sido agitada activa y enérgica, desempeñando un brillante rol en la Comuna Providencia.

Se incorporó al Partido Demócrata el año 1889.

Desde su iniciación en el Partido Demócrata, ha luchado sin descanso por el triunfo de la causa, no sólo en su comuna, sino en Santiago mismo, y en todas partes donde se le ha señalado un puesto de labor. Al respecto, recordamos que en Enero de 1903, don Domingo Galdamez hizo un viaje de exprofeso a la Calera y a la Cruz para reanimar el entusiasmo de esas agrupaciones.

Los electores de la Comuna de Providencia conocedores de su actividad, de su espíritu de progreso y su acrisolada honradez, lo eligieron municipal en el periodo de 1903 a 1906; y debieron quedar satisfechos de la actuación del regidor Galdamez, puesto que fué reelegido para un segundo periodo de 1906 a 1909.

La batalla más formidable que ha presentado ese jefe de la democracia en Providencia y que la ganó valientemente, cubriendo su frente de gloria, fué en una elección complementaria para Diputado, la que dio a don Artemio Gutiérrez el asiento en el Congreso que se le quería, por fuerza arrebatar. Don Domingo Galdamez con su batallón de demócratas no lo permitió.

Para terminar: El Siglo XX, periódico que redactaba en 1903 don Luis M. Concha, el 28 de Noviembre, refiriéndose a don Domingo Galdamez, dice lo siguiente:

«Los hombres que saben en todo momento luchar con decisión por la causa que juraron defender, los que no escatiman sacrificios de ningún género, los que con abnegación ilimitada abandonan sus propios intereses para velar por los de su Partido, esos hombres, escasos ya, son dignos del reconocimiento y de la admiración de sus conciudadanos.

Por eso El Siglo XX se enorgullece hoy al presentar a sus lectores el retrate del señor Domingo Galdamez, regidor municipal de la Comuna de Providencia, a quien se debe en parte principalísima el triunfo del señor Artemio Gutiérrez en la elección del 15 del presente (Noviembre de 1903).

A su actividad, a su entusiasmo a todas sus bellas cualidades de ciudadano y de demócrata que le adornan, debe la Democracia chilena el triunfo de un Diputado, triunfo que lo fué de la justicia y del derecho popular.

Es grata misión de periodista dar a conocer el temple de Domingo Galdamez.

Correligionarios como él son orgullos de la causa y un ejemplo para la juventud que se levanta.

El señor Galdamez ha escrito en la vida de nuestro Partido una página muy hermosa que habrá de marcarnos en todo tiempo el camino que deben seguir los soldados fieles a una causa.

Así se lucha: con abnegación, con bríos Así se triunfa: con el derecho y la honradez. Eso es segar los laureles para la Democracia.

Gloria pues a él, al correligionario que ha merecido bien de la Democracia y de sus hijos.»

Diciembre de 1907.

NOTA.—Una de las muchas dificultades que ofrece esta obra es la de poder obtener retratos buenos y oportunos para los clichees. El retrato que presentamos del Sr. Galdamez es tomado a la edad de 45 años.

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López, Osvaldo. "Diccionario Biográfico Obrero de Chile" Santiago de Chile, 1912.

Saludos

Jonatan Saona