8 de marzo de 2019

Manuel M. Rivas

Manuel María Rivas
El Doctor Don Manuel María Rivas.
(Texto tomado de "El Perú Ilustrado" Lima, 10 de marzo de 1888)

El señor Doctor Don Manuel María Rivas, nació en esta ciudad en Noviembre de 1832 — Fueron sus padres el respetable comerciante español Don Alberto Rivas y la señora Doña Francisca Pereira, limeña. —Hizo su educación en San Cárlos,recibiéndose de Abogado 1856.

El Doctor Arenas, rector del Convictorio, que apreciaba las aptitudes del jóven letrado, no bien terminó sus estudios, lo propuso para regentar la cátedra de Derecho Penal, fundada por él.

El Doctor Rivas ha figurado como periodista y como político.

Afiliado desde muy joven en el partido liberal, ha sostenido siempre con calor las ideas progresistas y de orden que constituyen la esencia de ese partido. Hasta 1868 ejerció la oficialía Mayor del Ministerio de Relaciones Exteriores, familiarizándose así con las cuestiones diplomáticas.

Con el mismo carácter había hecho la campaña de la Restauración, triunfante la cual, renunció ese cargo, por deferencia al señor J. A. Barrenechea que por muchos años lo había desempeñado.

Tan noble desprendimiento fué debidamente apreciado por el Doctor Mariateguí, que también profesó honrosa distinción al Doctor Rivas y le exijió que se encargase de la oficialía Mayor de Gobierno.

Poco después, Prado se proclamó Dictador y sirvió el mismo empleo, hasta que convocada la Asamblea de 1867; fué electo Diputado, por Angaraes.

Caida la Dictadura fué perseguido por Canceco y tuvo que permanecer oculto por algún tiempo, hasta que al fin consiguió que se le dejase tranquilo, sin que por ello cesase de inspirar desconfianzas y no deseando que se le volviera á perseguir se fué á Europa, donde permaneció hasta 1871.

Poco antes había defendido con enerjia por la prensa los intereses de la patria cuando se trataba del Contrato Dreiffus.

De regreso en Lima, trabajó con actividad por la candidatura de Ureta, pues, aunque era tan amigo de éste como de Don Manuel Pardo, había contraído en Europa el compromiso de ayudarlo.

Como ambos partidos no eran mas que fracciones del llamado civil, procuró con vivo anhelo que se hiciera una fusión, lo que no pudo conseguir, pero si obtuvo que en la lucha eleccionaria ninguna de las agrupaciones se ofendiera.

Al advenimiento de Don Manuel Pardo no ejercía cargo público ninguno, ni quiso aceptarlo por que creyó mas útiles sus servicios en la prensa, pues, ahí podía hacer conocer del país los elevados propósitos del ilustre mandatario.

La Legación de Bolivia y otros cargos fueron rechazados por él, separándose de la prensa solo por ingresar al Senado como representante de Ayacucho, cometito que ejerció hasta 1878.

Todos conocemos su actitud en el infausto día 16 de Noviembre de ese año en el que la mano de un vil asesino cortó la existencia de Don Manuel Pardo, cuyo cuerpo casi inerte ya, fué recibido en brazos por el Doctor Rivas que se hallaba á su lado.

Declarada la guerra fué enviado como Ministro Plenipotenciario á Colombia y en ese cargo tuvo ocasión de prestar valiosísimos servicios á la Causa nacional.

Vuelto á la patria, se alistó como soldado en el batallón número 4 de Reserva con el que asistió alas tristes jornadas de Enero.

En el Congreso de Chorrillos fué Senador por Ayacucho y para unificar el país y arribar á la paz, hizo en 15 días un viaje de ida vuelta á Cajamarca, obteniendo de Montero el reconocimiento del Gobierno establecido por García Calderón.

Preso García Calderón y hecho cargo Montero de la Presidencia, como Vicepresidente, el Doctor Rivas fué nombrado Ministro de Hacienda, cuyo cargo desempeñó desde Junio de 1882 hasta que se rechazó la tregua propuesta por Boliyia.

Perseguido entonces por los chilenos, estuvo oculto algún tiempo y regresó á Lima después de la batalla de Huamachuco.

El General Iglesias quiso que aceptase una de las carteras, á lo que se negó, originándole su negativa una persecución que terminó con el convenio del 2 de Diciembre de 1885, hasta cuyo día y á pesar de tener que estar oculto, prestó valioso auxilio al General Cáceres.

Constituido el Gobierno actual, el Dr. Rivas, sirvió algún tiempo la Cartera de Relaciones Exteriores y hoy nombrado Ministro Plenipotenciario del Perú en Bolivia, creemos que sabrá llenar las lejítimas esperanzas de la patria.

El Doctor Rivas ha compartido su tiempo entre el desempeño de importantes cargos públicos y la prensa. Con los señores Benigno Vigil, Doctor Pedro José Calderón y Clemente Althaus fundó "La Ilustración", con Don Mariano Amézaga, Luis B. Cisneros, Carlos Augusto Salaverry y Enrique Alvarado, "El Porvenir' que sostuvo los principios proclamados por Castilla, con los Doctores Quimper y Pazos redactó «El Perú», diario opuesto á Pezet y con el Doctor Ulloa, «La República», bisemanario que también hacía la oposición á ese General.

El Congreso de esa época, le encomendó la Dirección del «Diario de Debates», que aceptó sin que por eso dejase de ser consecuente con sus ideas liberales.

Para sostener la candidatura de Ureta fundó «El Republicano», que redactaron también D. E. Larrabure y Unánue y D. Mariano E. Terrazas.

En 1873. fundó con los Doctores Reinaldo Chacaltana y Andrés Avelino Aramburú «La Opinión Nacional» de cuya Redacción se separó para ingresar al Congreso, á mediados de 1874.

El Doctor Rivas ha colaborado en muchos otros periódicos nacionales y del extranjero, defendiendo siempre las ideas liberales con franca enerjía.

Estas breves líneas en las que hemos omitido las muchas consideraciones á que podría darnos lugar la carrera pública del Doctor Rivas, bastan para que conozcamos al que hoy nos representa en Bolivia, en cuya elección S.E. el General Cáceres ha procedido con el mejor acierto.


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Texto e imagen tomados de "El Perú Ilustrado" núm 44, Lima, 10 de marzo de 1888.

Saludos
Jonatan Saona

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