1 de abril de 2012

Recepción del Colchagua

Joaquín Cañas
Un Veterano de la Guerra del Pacífico y la recepción del Regimiento Colchagua en 1881

Autor :Juan F. Cornejo Acuña

Don Joaquín Cañas Serey, veterano de la Guerra del Pacífico, nacido en Valparaíso, hijo de Cipriano Cañas y de Ruperta Serey. 

Se casó en la Parroquia San Fernando Rey el 17 de Mayo de 1887 en San Fernando con Rosa Rojas Veras la cual era hija de José Ignacio Rojas y de María Veras, fueron testigos del Matrimonio Don Rómulo Díaz y Doña Florinda Correa.

Tuvo como hermano al veterano y Soldado de 1879, don Sandalio Cañas Serey el cual era muy amigo del veterano Isaac Ormazábal Canales del Batallón Vichuquén, natural de Cutemu, ambos regresaron con vida a San Fernando el Jueves 17 de Marzo de 1881, después de haber servido al país en la guerra del Pacífico y de haber hecho gran parte de la campaña del norte, participando en la Batalla de Chorrillos, San Juan, Morro del Solar y Miraflores entre otras.


Ese Jueves 17 de marzo, había acudido a la estación del ferrocarril en San Fernando casi todo el pueblo, con anhelo de recibir a sus representantes en el ejército del Norte. Las calles por las cuales debía desfilar nuestro Regimiento estaban vestidas de gala. El paseo de las Delicias fue cubierto de gallardetes, figurando en ellos los colores nacionales. Se ostentaban en el mismo paseo tres arcos triunfales, llamando la atención el construido por la señora doña Rosa Herrera de T.

La calle de Maipú, hasta la de Valdivia, estaba también tapizada de gallardetes como las anteriores, y figuraban en ellas tres arcos triunfales con sus respectivas inscripciones. De la misma manera estaba la calle de Valdivia; figurando en primera escala el magnífico arco que la Ilustre Municipalidad dedicaba al Regimiento Colchagua; el construido por la Sociedad Unión, que merece especial mención, y el construido por las alumnas de la escuela superior, que figuraba una media luna llena de inscripciones. En esta misma calle y frente al Liceo, don José B. Valenzuela, construyó una gran portada, por la cual debía desfilar el regimiento, al pasar para su cuartel.
Nunca San Fernando se había visto tan engalanado.

Un gran penacho de humo y el pito de la locomotora anunciaban la llegada del Regimiento a la estación de nuestra ciudad, el pueblo lo recibió con entusiastas aplausos y la banda de música, que la comisión de recepción hizo venir de Santiago, saludó a nuestros valientes soldados con el Himno Nacional.

A son de voladores desembarcó el regimiento y se formó en la misma estación, desfilando en seguida por la calle de las Delicias, con su comandante a la cabeza, el cual iba acompañado por el señor don José María Valderrama L., y el secretario de la Intendencia, el señor Riveros Parga.

El Viernes 18, por la mañana, se celebró en la matriz una misa de gracia con toda solemnidad, predicando el orador señor don Juan Francisco Riveros. A las 6 de la tarde se obsequió, en el hotel de la plaza, un gran banquete al comandante del regimiento, señor don Manuel J. Soffia y oficialidad. Reinó en el banquete el mayor entusiasmo en toda la inmensa concurrencia.

El Sábado 10, salió nuestro Regimiento al Campo de marte, en donde hizo un lucido ejercicio de fuego. En la noche de ese día, hubo en la plaza de Armas fuegos artificiales, en donde se quemó tanta pólvora como nunca se había visto en San Fernando. Nuestros hombres valientes soldados ya descansaban después de duras batallas en su ciudad querida.

Fuente: Archivo nacional, archivos parroquia San Fernando rey, Registro civil Vichuquén, fuentes familiares.


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texto tomado de www.vi.cl

Saludos
Jonatan Saona

1 comentario:

  1. Un gran banquete para el comandante y los oficiales...
    y mientras tanto el resto de la tropa miraba del frente como se comían ese banquete.....
    Se le construyeron monumentos a los oficiales,hasta darle casi un símbolo de dioses de parte de los chilenos.Ademas de buenas pensiones,y a algunos se les regalaron extensiones de terreno como premio por ejemplo a Patricio Lynch y Manuel Baquedano,en cambio a los soldados chilenos,les dieron una pensión que alcanzaba para un kilo de pan todos los días,mas encima algunos mutilados y en el total abandono.....Solamente hay que leer un poco mas relatos sobre la guerra del pacifico.Y creo que en Perú y Bolivia paso casi lo mismo,es mas,en Perú,enviaron a un oficial Peruano a comprar armamento al extranjero,y el muy patudo se fue con el dinero para comprar casas y terrenos fuera de Perú.....

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