Andrés A. Cáceres |
Carta del General Cáceres, en su primer período de la Campaña de los Andes, al Coronel Juan Manuel Cáceres.
"Ayacucho, marzo 24 de 1881.- Señor
Dn. Juan Manuel Cáceres.
Muy señor mío y tío:
Destinado el ejército de mi mando a defender la causa Nacional, a pesar de los inmerecidos desastres que ha sufrido en el campo de batalla, el sostenimiento impone a los pueblos, muy en particular a las clases acomodadas de la sociedad; obligaciones sagradas que no podían olvidarlas sin hacerse responsable de una pequeña parte de la dolorosa situación por que atravieza la República condenada a todos los horrores de una devastación y de conquista. Mientras se llegue a la paz compatible a la autonomía nacional será necesario continuar arrostrando los rigores y los peligros de la campaña.
En cuanto a mi toca, firmemente resuelto estoy en volver sobre el enemigo y rechazar sus huestes de la rica comarca de Junín que son hoy el campo de sus salvajes depravaciones, hasta estrecharlas de nuevo bajo los muros de Lima, donde el grueso de su fuerzas no me permitirá proceder sino de concierto con los ejércitos del Norte y Sur. Más para realizar este plan que no sólo reclama las exigencias de guerra, sino que consulta la seguridad de los departamentos de la zona, amenazados de cerca, por una invasión que todo lo atropella, desde el respeto a la propiedad hasta los fueros más sagrados del hogar y de la familia.
Es indispensable ante todas las cosas, reorganizar el ejército reparando las bajas que causaron en su filas la peste y la guerra; uniformarlo y equiparlo convenientemente, porque ahora se encuentra envuelto en harapos y descalzos; y por último asegurar su subsistencia por algún tiempo, proveyendo la Caja de los fondos de que carece absolutamente. Alentado por tan poderosas consideraciones que no dudo harán eco en el ánimo de Ud. abrigo la seguridad de conseguir el más satisfactorio resultado emitiendo un empréstito cuyo producto se destinará exclusivamente a la reorganización y sostenimiento del ejército del Centro.
Unificada como se halla la República bajo uno solo, para el objetivo importante a que están destinados, tienen en su favor la sólida e irrecusable garantía de la fe nacional, por que no corren las eventualidades consiguientes a la inestabilidad de un orden de cosas inciertas y no consagrado aún por el sello de los hechos consumados. De suerte que unidas a esta seguridad, la que ofrezco a Ud. por la presente, prometiendo bajo la religión de mi palabra, al reintegro de la suma con que quieran suscribirse al empréstito, con los primeros productos de la contribución personal, y sobre la renta apena se haya intentado una operación de este género, ni más santa por su objeto, ni más segura por las garantías que le rodean.
Por eso le prometo que no en vano invoco sus más generosos sentimientos, y que se apresure Ud. a dar de ellos un testimonio inequívoco proporcionándome el auxilio que reclamo en la medida que reclama a su posición social y fortuna. El encargado de la recaudación pondrá en mano de Ud. el certificado de préstamo.
De Ud. su obsecuente S.S.
ANDRES AVELINO CACERES"
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Centro de Colaboración Pedagógica Provincial del Magisterio Primario de la Provincia de Parinacochas. "Monografía de la Provincia de Parinacochas" Tomo I. Lima, 1950
Saludos
Jonatan Saona
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