Juan Crisóstomo Mendoza

Juan Crisóstomo Mendoza Pineda

Coronel Juan Crisóstomo Mendoza

Entre los valientes militares de la época de nuestra emancipación polí­tica, figura el muy benemérito cororonel don Juan Crisóstomo Mendoza, como uno de los tipos más perfectos del guerrero americano: soldado pundonoroso y leal, hombre de convicciones rectas y profundas, ciudadano austero y desinteresado, su inteligencia y su espada las puso siempre al servicio de las causas santas, ora para arrojar del suelo de la América el poder de la corona usurpador, ó bien en defensa del derecho y las instituciones escarnecidas y vilipendiadas por los malos hijos que, por desgracia, no han escaseado en este privilegiado suelo, cuna de tantos americanos ilustres.

El coronel don Juan Crisóstomo Mendoza, hijo legítimo del señor don José de Mendoza y de la señora doña María del Rosario Pineda, nació en Lima el día 27 de enero de 1805.

Inclinado, desde sus más tiernos años al estudio de las letras y complaciendo en ello, á la vez, á sus padres y á otras personas ilustres de su prestigiosa familia, era ya uno de los más aprovechados alumnos del real colegio de San Fernando, cuando el grito de Independencia dejóse oír en esta Capital, el día 28 de julio de 1831; solemne manifestación que, inmediatamente secundada por lo más brillante de la juventud limeña, abrióle de par en par las puertas de los colegios, los claustros de los conventos  y que, lo mismo que á otros condicípulos y deudos suyos, obligó al joven Mendoza á abandonar su carrera literaria y á ingresar al Ejército Independiente, para servir su patria en aquella colosal, desinteresada y tan penosa campaña.

El estudioso alumno de San Fernando Juan Crisóstomo Mendoza, pasó pues de esta manera á engrosar las filas del ejército peruano, como soldado distinguido del batallón Cazadores del Ejército, á la edad de diez y siete años, y ascendiendo, en rigorosa escala, siempre en campaña de las guerras nacionales, sobre el campo de batalla ó por sus importantes servicios á la patria, obtuvo la efectividad de coronel, por la gloriosa batalla de Ancachs, el año de 1839.

Su brillante foja de servicios, que copiamos en seguida, dará más exacta idea de la m anera como supo cumplir sus deberes como soldado verdaderamente patriota, pundonoroso y honrado.

REPÚBLICA PERUANA

EJÉRCITO NACIONAL — VENCEDORES.

El benemérito señor coronel don Juan Crisóstomo Mendoza — su edad, sesenta años — su país, Lima- su salud, achacosa —su estado, casado —sus servicios y circunstancias, los que se expresan — Sentó plaza de soldado distinguido el 23 de setiembre de 1821. Ascendió a sargento segundo distinguido, el 26 de setiembre de 1821. A sargento primero distinguido, el 1° de enero de 1822. A subteniente, el l.° de octubre de 1824. A teniente, el 1° de mayo de 1825. A ayudante mayor, el 3 de mayo de 1827. A capitán, el 27 de febrero de 1829. A sargento mayor graduado, el 27 de octubre de 1832. A sargento mayor efectivo, el 7 de enero de 1834. A teniente coronel graduado, el 14 de mayo de 1834, A teniente coronel efectivo, el 23 de abril de 1835. A coronel graduado, el 20 de enero de 1839. A coronel efectivo, el 19 de setiembre de 1842.

CUERPOS EN QUE HA SERVIDO.

En el batallón Cazadores del ejército 3 años, 7 meses, 18 días — En el Batallón N.° 1, 1 año, 7 meses, 18 días. — En el 2.° de Ayacuclio, 3 años, 11 meses, 10 días — En el l ° del Callao, 2 años, 8 días — En el 1° de A yacucho, 11 meses, 13 días —En el 1° de Pichincha, 2 años, 8 meses, 12 días —Edecán del Supremo Gobierno, 10 meses, 13 días — Primer jefe del batallón Legión Peruana, 1 año, 8 meses, 11 días — Desterrado al Ecuador, por el general Santa Cruz, 10 meses, 11 días — Primer ayudante del E. M. G. del Ejército Restaurador, 2 meses—Primer jefe del Batallón Gamarra, 1 año, 3 meses —Primer jefe del Batallón N.°2, 8 meses —En el Estado Mayor General, 1 mes —Retirado por el general Vivanco, 10 meses. 6 días —Primer jefe del Batallón Rímac, 2 meses. 1 día — Agregado á la plaza, 19 días —Mayor de Plaza de esta Capital, 9 años, 4 meses, 20 días —En el cuaderno de vencedores, 3 años, 4 meses, 1 día — Intendente de Policía de Lima 1 año, 5 meses —Prefecto de Lima, 1 año, 3 meses—Vencedor en esta Plaza, 3 años, 1 mes—Prefecto de Ayacucho, 1 año, 1 mes, 19 días—Vencedor en esta Plaza, 1 año, 6 meses, 20 días.

Total de servicios, hasta fin de Diciembre de 1865—44 años, 3 meses, 15 días.

CAMPAÑAS, BATALLAS Y ACCIONES DE GUERRA EN QUE SE HA HALLADO.

La de intermedios, el año de 1823, á órdenes del señor general don Andrés Santa Cruz — La del año de 1824, á órdenes del señor general Sucre—La del año de 1825, á órdenes del mismo señor general —La de las Punas de Iquicha, en el año 1830, á órdenes del señor general Pardo de Zela—La de Colombia, en 1839, á órdenes del señor general La Mar—La de Bolivia, en 1831, á órdenes del señor general Gamarra—La de la Restauración, en 1838 y 1839, á órdenes de dicho señor general—La 1841 sobre Bolivia, á órdenes del mismo señor general.

BATALLAS

La de Zepita, en el año de 1823 — La de Junín, en el año 1824—La de Ayacucho en el mismo—La de las Punas de Iquicha, en el año de 1826 —La del Pórtete de Tarqui, en el año de 1829 — La del Puente de Buín, en el año de 1839—La de Ancachs, en el mismo año de 1839.— La de Ingavi en el año de 1841.

MEDALLAS

La de Zepita — La de Junín—La Ayacucho—La del Busto de Bolívar -- La de Ancachs—La de Restauradores — La de Desterrados al extranjero—Un escudo de honor, por la toma del Castillo, en el año de 1834.

RESUMEN

Tiempo de servicios, hasta fin de diciembre de 1865, cuarenta y cuatro años, tres meses, quince dias.

Abono por ocho campañas, á seis meses y la de 1824 con tiempo doble, cuatro años, seis meses.

Abono por ocho batallas, á un año cada una, según ley, ocho años.

Total general, hasta la fecha, cincuenta y seis años, nueve meses, quince días.

Lima, Diciembre 31 de 1865.

Juan Crisóstomo Mendoza

PASCUAL SACO

CORONEL Y SUBINSPECTOR DEL EJÉRCITO.

Certifico: que la precedente hoja de servicios es conforme con la original, comprobada y cerrada á fin de octubre de 1858, que certificada por el señor General don Pedro Diez Canseco en cinco de agosto de ese año, existe en el archivo de esta oficina, con la diferencia de haber aumentado en esta la época trascurrida desde fin de octubre de 1858, hasta fin de diciembre de 1865.

Lima, Mayo 27 de 1866.

Pascual Saco.

Aumento

Desde el 31 de diciembre de 1865, fecha de la anterior hoja de servicios, el benemérito coronel Mendoza pasó revista de comisario en esta plaza, como en servicio activo, seyún la ley del Soberano Congreso, hasta el 31 de diciembre de 1880, que fué la última anterior al tiempo de la ocupación chilena; resultando, en consecuencia, un aumento de servicios á su favor, de quince años cabales, que, unidos á los anteriormente expresados, arrojan un total efectivo de setenta y un años, nueve meses quince días de servicios á la Patria.

No obstante, el coronel Mendoza sobrevivió aún á la última fecha que hemos citado, pues falleció el 19 de julio de 1882, durante el tiempo de la ocupación, es decir; un año, seis meses y diez y nueve días después del 31 de diciembre de 1880; tiempo que, en todo rigor de justicia y según ley del Soberano Congreso, debía haberle sido abonado como un servicio activo, por su condición de Vencedor de la Independencia. De suerte, que unido ese último tiempo de su vida á la totalidad anterior de sus servicios, habría formado la respetable suma de setenta y tres años, cuatro meses y cuatro días de buenos servicios, casi igual á la de los años de vida del que los prestó: pues el benemérito señor coronel don Juan Crisóstomo Mendoza, falleció, como hemos dicho anteriormente, el día 19 de julio de 1882, á la edad de setenta y siete años, cinco meses y veintidós días, lleno de vigor y actividad todavía, y en el más completo ejercicio de sus facultades intelectuales, entre las que su memoria fué siempre y hasta sus últimos instantes un verdadero prodigio.

A más de los servicios que se patentizan en la precedente hoja, el Coronel Mendoza ejerció otros cargos muy honrosos y desempeñó comisiones de altísima importancia, confiadas á su inteligencia, rectitud y elevado patriotismo, tales como las de Jefe Fiscal Militar en asuntos ruidosísimos y en circunstancias de las más difíciles en política, para el país.

En Agosto de 1841, hallándose nuestro ejercito en campaña sobre Bolivia y en su cuartel general de Puno, al mando de su General en Jefe, Gran Mariscal D. Ramón Castilla, el Coronel Mendoza fué nombrado Comandante General del Departamento de Arequipa, con facultades amplísimas y extraordinarias para dar cumplimiento á las instruccciones secretas de esa ardua y muy difícil comisión memorable en la política del país y que el coronel Mendoza supo llenar tan á satisfacción del Supremo Gobierno como de lo más respetable y selecto del vecindario de aquella ciudad histórica.

 

En 1848 desempeñó la Gobernación de la ciudad y puerto del Callao, salvando con admirable tino, sagacidad y prudencia las dificultades que por entonces ofrecía su administración.

Fué Senador suplente por el departamento de Lima, en la legislatura de l853; y por supremo decreto de 18 de agosto de ese mismo año, se le confió la delicada comisión de inspeccionar las Islas de Chincha, como depósitos de huano, siendo contratista de ellas el señor don Domingo Elias y Gobernador Político el General Valle Riestra.

En febrero de 1854 fué ntunbrado Inspector General del Ejército, puesto que desempeñó con las aptitudes de un honrado y valiente veterano, hasta el día en que la batalla de la Palma puso término á la administración del General Echenique.

En 30 de julio de 1858 fué llamado al seno de la "Sociedad Fundadores de la Independencia” como miembro nato de ella, por sus méritos y servicios prestados en favor de la santa causa: y ese mismo año fué propuesto en las cámaras legislativas para ser ascendido á General de Brigada.

El Ilustre Colegio de Abogados de Lima, nombróle en enero de 1861 Abogado Honorario y miembro de su seno, expidiéndole el correspondiente diploma; y, posteriormente, otras asociaciones científicas y literarias lo inscribieron también con el mismo carácter entre el número de sus miembros.

En 1864 fué nombrado por el Supremo Gobierno Inspector General en comisión de las fuerzas pertenecientes a la Brigada de Marina, residentes en el puerto del Callao, bajo las faces de la moralidad, instrucción, manejo mecánico y de caudales; cuyo desempeño, muy á satisfacción del Gobierno, le mereció aplausos y honrosas felicitaciones por el Órgano oficial del correspondiente Ministerio.

En octubre de 1868 fué nombrado por el gobierno del Excmo. señor Coronel don José Balta, Presidente de la Junta Calificadora de servicios militares, compuesta de siete vocales, con las atribuciones detalladas en el decreto supremo de esa fecha; y esta fué la última comisión que en el orden administrativo y de gobierno desempeñó tán ilustre como meritorio jefe.

El Coronel Mendoza vióse también en la dura situación de saborear el amargo pan del proscrito; pues fué desterrado al Ecuador en octubre de 1837, y á Chile en marzo de 1855, después de la batalla de la Palma, habiendo sido llamado de este último, por el mismo General Castilla en julio del citado año, para que, regresando al seno de la Patria, se hiciera cargo del escabrosísimo puesto de Intendente de Policía de Lima, del que posteriormente pasó á desempeñar la Prefectura, con general aplauso y satisfacción de todos.

Propuesto, como anteriormente hemos dicho, para General de Brigada, en la legislatura de 1858, la proposición fué aplazada en enero de 1859, por causas independientes á la voluntad de los miembros de las cámaras que encontraban justo y bien merecido ese ascenso. Igual cosa pasó en la legislatura de 1860; hasta que en la 1867 cuando se esperaba por instantes que la proposición fuera admitida y votada sin discusión, como debía serlo en justicia, resultó desechada por un voto en contra, obra de un cobarde enemigo solapado del honrado y valiente militar que como autoridad local, no había consentido en cierta ocasión los desmanes de los conspiradores contra el Gobierno legalmente establecido.

Posteriormente se trató de reconsiderar aquella proposición: pero el Coronel Mendoza que, ante todo era pundonoroso y que tenia estimación por su persona y por los méritos de su brillante carrera, se opuso siempre y hasta suplicó á sus amigos que jamás volvieran á ocuparse del asunto.

El Coronel Mendoza, en su larga carrera militar, jamás conspiró contra el orden constitucional ni entró en revolución alguna: pues siempre sirvió á los gobiernos legítimos y fué consecuente con ellos hasta el último momento de su administración —cualidad esencial de su carácter honrado que le valió la estimación y el aprecio de todos los hombres que han figurado en el país, y que hacía que siempre fuera llamado al servicio de la Nación, ocupando cargos, á la vez que muy honrosos, de inmensa responsabilidad.

Tampoco figuran en la hoja de servicios que de tan ilustre Jefe publicamos hoy, los últimos que prestó como soldado en campaña en favor de la integridad y de la honra de su patria —El Coronel Mendoza concurrió al combate del "2 de Mayo”, en el Callao junto con los demás veteranos de la Independencia, que fueron destinados al Castillo, y permaneció á las órdenes del Director de la Guerra, en esta Plaza, durante los combates de San Juan, Chorrillos y Miraflores, en Enero de 1881.

Profundamente afectado su ánimo por estos últimos desastres entregóse desde entonces al dolor, en el mayor aislamiento de sus numerosas relaciones sociales; y atacado de una violenta enfermedad, falleció, en esta Capital rodeado de su amorosa familia, el dia 19 de Julio de 1882.

¡Paz en la tumba del venerable anciano y muy valeroso soldado. Fundador de la Independencia del Perú y vencedor en sus gloriosas batallas. Benemérito señor Coronel D. Juan Crisóstomo Mendoza.

A. de la E. Delgado.

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Texto e imagen tomados de "El Perú Ilustrado" núm 272, Lima, 23 de julio de 1892.

Saludos

Jonatan Saona