Cuartel Jeneral del Ejército Espedicionario del Norte.
Lima, Junio 18 de 1883.
En nota de 12 del corriente el señor comandante don H. Gonzalez, trascribe una de VS. de 6 del actual que hace ver con sentimiento a este cuartel jeneral que VS. no se ha proporcionado datos i noticias fidedignas acerca del número o posiciones de la fuerza enemiga, circunstancia que este cuartel jeneral ha considerado siempre en las repetidas instrucciones remitidas a VS. de primordial i preferente atención.
VS. supone en la nota de mi referencia que la sección del enemigo, al mando del coronel Recabárren, cuyo núcleo lo forma el batallón Pucará, tiene un efectivo compacto de 800 hombres i una série de destacamentos en Huailas i Caraz que suman 1,600 hombres adicionales.
Dato es este completamente inexacto, pues, como lo espresa la comunicación de este cuartel jeneral a VS., de 10 del corriente, las fuerzas de Recabárren todas juntas no pasan de 900 a 1,000 hombres, mal armados i sin disciplina i el elemento compacto del batallón Pucará no excede de 280 hombres.
Nota posterior del mismo comandante Gonzalez en que así mismo trascribe otra de VS. de 11 del actual, hace suponer a este cuartel jeneral que VS. ha rectificado el error que dejo apuntado i está ya persuadido de ser exacta la cifra que indicó el cuartel jeneral en las recordadas instrucciones de 10 del corriente, pues ella espresa que VS. que debía marchar desde Angasmarca a Mollepata, tuvo el pensamiento de retrogradar hácia Cajabamba para caer sobre el jefe Puga; pero parece que VS. abandonó dicho propósito por no haber confirmado VS. el principio de su ejecución, lo que hace presumir a este cuartel jeneral que esa rectificación de movimiento, nace de haberse VS. convencido de que las fuerzas enemigas en Cajabamba fueran demasiado insignificante para ocupar la atención de VS. i distraerlo de sus planes.
En vista de las vacilaciones que nota este cuartel jeneral en las determinaciones de V.S., sea por la poca fijeza que haya podido adquirir de las posiciones del enemigo i aun de su número, se encuentra este cuartel jeneral perplejo para ordenar a VS. movimientos precisos.
Con todo, este cuartel jeneral pone delante de V.S. los datos siguientes i que deberán inclinar el ánimo de VS. a obrar de una manera consecuente con ellos.
El coronel Recabárren hizo solamente una marcha al Norte de Huaráz i contramarchó en seguida buscando su reunión con Cáceres, como éste se lo hizo ordenar i es por tanto inexacto que aquel, ni montonero alguno de consideración, haya estado en Payanca.
Es obvio que Recabárren, se ha reunido a Cáceres o nó, pretende atacar al Jeneral Iglesias i quizás juzgue lograrlo mejor esquivando el encuentro prévio con nuestras fuerzas i para ello tome el camino a Cajamarca por Parcay i Pataz.
Sea lo anterior exacto o nó, debe VS. conformar todos sus movimientos a fin de producir el doble resultado que le tiene este cuartel jeneral encomendado a las fuerzas de su mando, es decir, destrezar a Recabárren i demás montoneros, estorbando se reúnan con Cáceres i protejer al Jeneral Iglesias de este último caudillo.
Si para ello necesitare VS. un número cualquiera de tropas mayor del que actualmente tiene, queda VS. autorizado para pedirlas de las diseminadas en el Norte, i aun si esas no bastaren, a este cuartel jeneral que sin tardanzas la enviara, pues nada debe dejarse por hacer para que VS. coopere eficazmente en la parte que le corresponde a obtener el propósito fijo e incontrastable que tiene este cuartel jeneral de que toda fuerza enemiga de los departamentos del Centro i del Norte a la mayor brevedad sean batidas i dispersadas hasta el último hombre por nuestras fuerzas.
Ninguna razón de clima, mala estación, ni dificultades de camino serán aceptadas por este cuartel jeneral ni como atenuación, ni ménos justificativo de cualquiera paralización en los movimientos de V.S.
Este cuartel jeneral considera que V.S. debe seguir su marcha al Sur si bien tomando las precauciones que en las instrucciones de 10 de Junio se hacían a V.S. i que ahora se reiteran, recordando especialmente las que se refieren a evitar sorpresas i combates en posiciones desventajosas. Así mismo no olvidar que V.S. debe engrosar su división con tropa que pida a Trujillo i Lambayeque i llegar a reunir una división competente para contener a Cáceres, mientras llegue la división al mando del coronel Arriagada.
Las fuerzas de los comandantes Gonzalez i Carvallo están a la disposición de V.S. a la primera intimación de V.S.
Si Cáceres tomara el camino de Parcay, VS. deberá contramarchar hácia Cajatambo i sujetarle por esa parte a fin de, como se ha dicho, protejer al Jeneral Iglesias i sus reducidas fuerzas de un ataque de dicho caudillo.
Provecho fuera indicar al Jeneral Iglesias que convendría que él se dirijiera a la costa a tomar posesión de los de San Pedro hasta Payta, donde le sería fácil reunir suficientes fuerzas para dominar los departamentos del Norte, el valle de Chicama inclusive a fin de encontrar las fuerzas chilenas en Chicama i servir este punto de base de nuestras operaciones militares que tienen que ser mui activas i delicadas para detener a Cáceres i Recabárren, única manera de no esterilizarse tanto esfuerzo i sacrificio nuestro i lograr los fines ulteriores del Supremo Gobierno.
Ya V.S. sabe que un trasporte en permanencia habrá en la costa para los movimientos que convengan efectuar.
Mui presente debe V.S. tener que la responsabilidad de cualquier ataque favorable de Cáceres, Recabárren u otro montonero sobre el Jeneral Iglesias pesaría totalmente sobre V.S. No duda este cuartel jeneral que un jefe de la consideración de V.S., asumiendo tan grave responsabilidad, sabrá conjurar toda circunstancia que pudiera dejarle en descubierto
A última hora este cuartel jeneral envía instrucciones al comandante Gonzalez para que se desocupen por nuestras armas en favor del Jeneral Iglesias los pueblos de Trujillo i Salaverry con todos sus recursos.
Indícasele al comandante Gonzalez que puede retirarse con sus fuerzas a algún punto como Otuzco, Santiago de la C. u otro que reúna condiciones de estación militar conveniente. Deberá sí dejar el comandante Gonzalez una pequeña división en Salaverry a fin de que V.S. tenga espedita una línea de comunicación que trasmita inmediatamente las órdenes de V.S.
El comandante Gonzalez queda informado por este cuartel jeneral que debe hacer reunir todas las fuerzas del Norte a la primera órden de V.S., pero esa órden no deberá darse sino para el caso de que Cáceres se escape al Norte i entonces sea preciso reunir todo el efectivo de mas de 2,500 hombres de que disponemos en el Norte i perseguir sin tregua al espresado caudillo que en ningún sentido debe escapar en esta espedicion.
Reitero a V.S. la confianza que inspira a este cuartel jeneral la decisión i acierto de V.S. en las operaciones que le tienen encomendadas.
Dios guarde a V.S.
P. Lynch
Al señor coronel don Alejandro Gorostiaga.
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Ahumada Moreno, Pascual. "Guerra del Pacífico, Recopilación completa de todos los documentos oficiales, correspondencias i demás publicaciones referentes a la guerra que ha dado a luz la prensa de Chile, Perú i Bolivia" Tomo VIII, Valparaíso, 1891.
Saludos
Jonatan Saona
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