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Importantes detalles del nefando crimen chileno en el territorio boliviano.
Honor a las autoridades que han cumplido su deber.
De una carta dirijida de Tacna a esta ciudad por persona autorizada, tomamos lo siguiente:
Señor D. N. N.
Tacna, febrero 20 de 1879.
“Estimado amigo:
Me tiene U. en esta ciudad desde ayer, expatriado en razón del alevoso atentado cometido en Antofagasta por el infame Chile.
El Prefecto, coronel Zapata, así como también el Comandante general, coronel Canseco, no han podido portarse mejor; y todos los nacionales no tendremos inconveniente alguno para manifestarlo hoi y siempre. Ambos amigos quedaron en Cobija, y supongo que se hayan retirado a Calama.
Le haré un resúmen de lo sucedido, que ya verá U. los detalles en los partes oficiales que se han remitido.
El día 14 a las 6 a. m. fondearon en la bahía de Antofagasta el “Cochrane” y la “O’Higgins;" a las 6 1/2 mandó el jefe de la expedición coronel Sotomayor una nota al prefecto anunciándole la ocupación, y un cuarto de hora después se desembarcaron 300 [trescientos] hombres. El pueblo, compuesto de 4 o 5 mil rotos, se sublevó en el acto, y se entregó a un delirio mui criminal; despedazaron los escudos de la policía y prefectura, y estropearon a los diez celadores que habían en la policía, hiriendo también al comisario Luis Valverde.
Acompañamos al Prefecto hasta el último momento, y por estar juntos indudablemente, nos salvamos de ser víctimas del pueblo infame o sea rotaje chileno. Ese mismo día mandaron a Caracoles cien hombres, que supimos llegaron en la noche del 15 y se apoderaron del mineral. El Sub prefecto Lara se retiró a Calama con su fuerza.
El 15 desembarcaron como 100 hombres mas, A las 2 P. M. de este día, salió la “O’Higgins" a tomar Mejillones, no sé lo que allí haya sucedido.
En Antofagasta asesinaron al sarjento Antequera, su mujer y un niño; y en Salinas a cuatro cochabambinos, cuyos nombres se ignoran. Supongo que en Salinas o Cármen alto se hayan cometido mayores exesos.
Como doscientos ochenta, entre hombres, mujeres y niños bolivianos, salimos de Antofagasta el domingo, desembarcándose en Cobija, Tocopilla y la costa peruana.
Vino custodiando al vapor “Amazonas" el blindado “Blanco Encalada" y se quedó en Cobija; temo que apénas salido él vapor, haya bloqueado el puerto.
Puede U. imajinarse cuánto hemos sufrido moralmente con los insolentes rotos y titulados decentes.
El día 17 debían reunirse los chilenos aptos para guardia nacional; al efecto, se desembarcaron mil rifles, cien mil tiros y uniforme. También desembarcaron una batería de artillería con cuatro piezas obuses y dos ametralladoras.
Tales, amigo, contado en resúmen, el incalificable atentado cometido por Chile. No nos queda otro recurso que la guerra y el completo exterminio de los invasores.
Tengo confianza en que el gobierno se pondrá a la altura de su deber.
Suyo, siempre amigo.
N. N."
Ir a de Dios! ¿Y el pueblo boliviano ha de soportar impasible el cruel ultraje a su autonomía nacional?
¡¡Nó, mil veces nó!!
Morir antes que esclavos vivir!
La Paz, febrero 28 de 1879.
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"El Comercio". Año II n° 173. La Paz de Ayacucho, domingo 2 de marzo de 1879.
Saludos
Jonatan Saona
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