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| Mariano Perea Manrique |
por: Gilberto Salas
Para el Batallón Junín N° 21, Guarnición de Huancané
Con documentos (1) y con referencias de personas honorables, vamos a intentar escribir esta modesta biografía del Coronel Perea, héroe nacional olvidado.
Se dice que nació un 16 de octubre, y por los datos consignados en los documentos que tenemos a la vista se deduce que fué el año de 1848 en la ciudad de Arequipa. Fueron sus padres don Manuel Perea y doña María Manrique.
Niño aún se fué a vivir con sus hermanos (2) a Huancané y se asegura que durante corto tiempo estuvo dedicado al comercio en esa provincia y en Bolivia.
Sentó plaza en clase de Teniente y en el grado de Capitán el 7 de mayo de 1865. En el batallón "Costas" y en el "Puno" N° 17, del Ejército Restaurador concurrió a la campaña de 1865 á orden del Coronel Miguel San Román y del General Pedro Diez Canseco. Tomó asimismo parte en la campaña de 1866 durante la guerra con España a órdenes del Coronel Mariano Ignacio Prado combatiendo en el Callao contra la escuadra española el 2 de mayo de 1866. Pasó algo después a la Gendarmería de Puno y en seguida a la "Columna Cazadores de San Román".
Capitán
El 12 de octubre de 1867 fué ascendido a Capitán efectivo, siendo incorporado al Batallón "Castilla N° 8" comandado por el Coronel Francisco Luna.
En el año de 1867 se dice que estalló en Huancané una gran sublevación indígena capitaneada por el Coronel Juan Bustamante ("El Viajero") y por don Antonio Riveros, sublevación que fué debelada por el Coronel Andrés Recharte. Pero, hemos hallado un opúsculo escrito por Manuel Modesto Choquehuanca (3) en el cual niega que hubiera tal sublevación y sostiene que lo que sucedió fué que Bustamante, Riveros -que era Subprefecto de Huancané-, el Coronel Moya, Belisario Gálvez, Mariano Solórzano de Putina, el mismo Choquehuanca y otros, movilizaron a los indios organizándolos en Batallones, para combatir la revolución del General Pedro Diez Canseco y luchando ellos en defensa del presidente Prado, Combatieron en Huancané, Muñani y Puno, ciudad que capturaron, siendo poco después derrotados en Pusi. Como consecuencia de la lucha hubieron indios ahorcados en Huancané, 3 guardias nacionales quemados vivos en Muñani, 70 hombres asfixiados en Pusi, donde también fue bárbaramente asesinado el Coronel Bustamante. Existen actualmente en el pueblo de Pusi algunos restos del monumento que se levantó en homenaje a Bistamante. Riveros pagí una multa de tres mil pesos, Solórzano mil, Gálvez y Choquehuanca a quinientos pesos cada uno. De todo esto, así como del flagelamiento de centenares de indios, hace Choquehuanca responsable al Coronel Recharte. Este Coronel sería el más feroz ya que en el opúsculo que comentamos, no dice nada de otros jefes como el Coronel Luna y el General Baltazar Caravedo, Comandante General de las tropas (4). Se asegura que el Capitán Perea vino con estas fuerzas a Huancané. En su libreta de servicios consta que hizo la campaña de 1867, a órdenes del Coronel Miguel San Román pero no dice si en favor o en contra de Prado.
En julio de 1872 se retiró del ejército por no estar de acuerdo con la dictadura del Coronel Tomás Gutiérrez. Fué testigo presencial de la orgía de sangre de esos días que culminó con el asesinato del Presidente Balta y de los hermanos Gutiérrez. Después de breves días fue llamado al servicio por el Coronel Herencia Zevallos, al Batallón "Ayacucho" comandado por el Coronel Francisco Luna. Poco después pasó al Batallón "Callao N°4" comandado por el Coronel Buenaventura Aguirre.
Mayor
El 4 de mayo de 1876 fué ascendido a Mayor y nombrado segundo jefe del Batallón "Callao N°4". Tomó parte en las campañas contra el incansable revolucionario don Nicolás de Piérola. Combatió en Los Ángeles, Samegua y Yacango. El 20 de diciembre de 1876 fué ascendido a Teniente Coronel graduado. El 10 de mayo de 1877 combatió como jefe de guarniciones en el combate naval de Pacocha, contra el monitor "Huáscar", buque sublevado por Piérola.
Teniente Coronel
El 16 de diciembre de 1878 es ascendido a Teniente Coronel efectivo y nombrado segundo jefe del Batallón "Lima N°8" comandado por el Coronel Remigio Morales Bermúdez.
Chile, corvo en mano, avanzó a conquistar el salitre y, el 2 de abril de 1879 se embarca con su batallón que forma la división Vanguardia, rumbo a Iquique, bajo las órdenes del General de Brigada Manuel de la Cotera. Luchó contra los rotos en San Francisco el 19 de noviembre de 1879, en Tarapacá el 27 del mismo mes y año y en el "Campo de la Alianza" el 26 de mayo de 1880.
Con los restos de su batallón se replegó a Arequipa. Pasó a Puno como Ayudante del Contralmirante Lizardo Montero. Volvió a Arequipa al Estado Mayor General del Sur a órdenes del Jefe Político y Militar Pedro A. del Solar.
Coronel
El 10 de febrero de 1883 fué ascendido a Coronel con la antigüedad del 27 de noviembre de 1879, por su actuación en la batalla de Tarapacá.
Asumió sucesivamente la jefatura de los batallones "Túpac Yupanqui" y "Piquiza".
No hemos podido todavía establecer si el Coronel Perea tomó parte en las demás batallas de la Guerra con Chile por haberse perdido varias fojas de su libreta de servicios, pero posiblemente asistió a ellas, especialmente a la batalla de Huamachuco, según se deduce del borrador de su discurso pronunciado en su sepelio, que conservamos.
Fué uno de los que se opuso a la paz con Chile y luchó en ese sentido con el General Andrés Avelino Cáceres, fué Jefe de Estado Mayor del Ejército del Centro en la expedición sobre la ciudad de Arequipa por la causa constitucional representada por el General Cáceres. Tomó parte en la Campaña de 1885 contra el General Miguel Iglesias. Combatió en el pueblo de Canta contra el mismo el 15 de agosto de 1885, siendo Primer Jefe del Batallón "Caras"?. Estuvo en comisión en el centro durante tres meses con el Coronel Remigio Morales Bermúdez delegado del General Cáceres. Y también en la nueva organización que se dió al ejército en Andahuaylas, fué nombrado Jefe de la Primera Sección del E.M.G. cargo que desempeñó hasta el 2 de diciembre de 1885 fecha en que después de la famosa "huaripampeada" y de sangrientos combates, ingresó a Lima con el General Cáceres.
Asumió poco después la jefatura del batallón "More" al que poco después, se le cambió el nombre por el de "Huamachuco N°6"
Luego pasó con su batallón a Arequipa. En el diario "El Siglo" de Puno en un artículo histórico titulado "Monseñor Huerta", firmado por Pierre Gamys (5) hemos hallado la siguiente anécdota:
"Fué en 1887, cuando era Prefecto de Arequipa don Manuel San Román, que de orden del gobierno del General Cáceres y cumpliendo ley del Congreso, se expulsó a los Jesuitas del Perú.
Los pocos que habían llegado por Arequipa, acudieron al Palacio Episcopal.
El pueblo arequipeño, que en ese entonces era fervoroso creyente representado por ambos sexos de sus clases distinguidas, hizo guardia en derredor del Obispo, tratando de impedir la salida de los jesuitas; atrancó puertas y ventanas. Hombres y mujeres ofrecieron morir antes que dejar que les quitasen a los ministros predilectos. El Obispo agotó su talento, su diplimacia, su palabra y sus vínculos sociales.
El Prefecto encomendó el cumplimiento de la orden al Batallón "Huamachuco" que comandaba el Coronel Mariano Perea, y éste que, como militar celoso de la disciplina no retrocedía ante ningún obstáculo, hizo poner escalas, asaltó el Palacio y arrancó de brazos del Obispo a los padres que debían ser expulsados, y los envió a Bolivia, por la vía de Puno en un tren de media noche.
Monseñor Huerta, que era un hombre de honor, quedó anonadado.
Fué la primera vez en mi vida (que oí años después a mi abuelo paterno a quien distinguía con su amistad y sus consejos), fué la única vez que lamenté vestir sotana y verme imposibilitado de arrancarle los galones de ese soldadote"...
Se refería al Coronel Perea. Y, el Obispo ignoraba entonces y tal vez lo supo después que el dicho Coronel era pariente cercano de quienes escuchaban su vehemente y muy sincera confidencia.
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Según la libreta que conservamos tenía el Coronel Perea un total de servicios de 25 años, 10 meses y 24 días hasta el 30 de setiembre de 1889.
Pero, siguió en el mismo Batallón varios años más. Conservamos una Revista de Comisario (6) fechada en Lima el 10 de noviembre de 1892 por la que consta que el Batallón "Huamachuco" tenía un efectivo total de 267 hombres, siendo Primer jefe el Coronel Perea, Segundo jefe el Teniente Coronel Víctor Pacheco y Tercer jefe el Mayor Teodoro A. Velarde. Capitanes: Arturo Cornejo, Hipólito Hurtado, Manuel Dávila, José R. Valencia y Avelino Céspedes; Tenientes: Juan A. Luna, Mariano A. Céspedes (abanderado), Abelardo Guillet, Mariano La Jara, Tomás C. Chillet, Tobías Contreras, José M. Cuadros, León Alarcón, Julio A. Márquez y Ezequiel Huguet; Subtenientes: Domingo Gómez Sánchez, Emilio Távara, Agustín Gamarra, Manuel M. Ramírez, Carlos Ochoa, Carlos R. Echazú y Belisario Zegarra; 7 Sargentos Primeros, 20 Sargentos Segundos, 25 Cabos Primeros, 24 Cabos Segundos y 188 individuos de tropa.
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En noviembre de 1893 se embarcó en el Callao, enfermo, desahuciado por los médicos, llegando a Huancané el 22 del mismo, falleciendo en la madrugada del 26.
Se dice que fué ascendido a Coronel efectivo después de la batalla de Huamachuco y que como recompensa a su actuación se bautizó a su Batallón con el nombre de "Huamachuco N°6".
Y, hemos llegado al final de la biografía. Patriota y militar de verdad, hombre de guerra, forjado en el cuartel y los campos de batalla, el Coronel Mariano Perea NO FUE de esos "Coroneles" de pacotilla, latifundistas, politiqueros y presupuestivos que merodearon en los picachos altipampinos....
Duerme el sueño eterno en las entrañas de la bravía tierra huancaneña donde también descansan sus hermanos. En esa tierra de la que los soberbios monolitos de Taraco son los más remotos centinelas de su Historia. En esa tierra que conquistara el bravo Sinchi Roca, hijo de Huayna Cápac Inca. En esa tierra que amó mucho, descansa en paz nuestro héroe, envuelto en el sudario del olvido, sin que, ni una cruz, ni una piedra, ni una flor señalen su lecho frío.
Que estas letras como otras tantas lágrimas caigan sobre la aridez tarapaqueña de su tumba.
Azángaro, Noviembre de 1954
Gilberto Salas
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(1) Libreta de servicios que tiene prestados a la Nación el señor Coronel graduado de Infantería del Ejército Dn. Mariano Perea. Archivo de Gilberto Salas.
(2) Los hermanos del Coronel Perea fueron: Manuel Benjamín, José, Guillermina y Grimanesa. Todos descansan en Huancané menos la última que fue enterrada en la capilla del pueblo de Airampani.
(3) Manuel Modesto Choquehuanca.- "Vindicación" La Paz, 1868.
(4) Diccionario Enciclopédico Hispano-Americano, Barcelona 1889.
(5) "El Siglo" Puno N° 3265 del sábado 15 de diciembre de 1923. "Pierre Gamyú" seudónimo de Gustavo Manrique.
(6) Ejército Nacional, Revistas de Comisario.- Lima 10 de noviembre de 1892. Archivo de Gilberto Salas.
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Texto publicado en el diario "Los Andes" viernes 26 de noviembre de 1954, recorte del diario proporcionado por Jesús Sánchez.
Jonatan Saona
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