Páginas

27 de noviembre de 2011

Parte de Velarde sobre Tarapacá

Parte de Baltazar Velarde sobre la batalla de Tarapacá

COMANDANCIA GENERAL DE LA QUINTA DIVISIÓN.

Tarapacá, noviembre 28 de 1879.

El día de ayer fue de júbilo para la patria, pues triunfantes nuestras armas en la célebre y memorable batalla que se libró con las fuerzas enemigas en las alturas de esta población, ha dado una prueba más de la virilidad, patriotismo y decisión de nuestros soldados, que con la energía que infunde siempre la defensa de las causas nobles y sagradas combaten con la serenidad de los héroes y con la entereza de los mártires.

Sorprendido por el enemigo, a las 9 A.M. del día citado, recibió la comandancia general orden de V.S. para que desfilaran los cuerpos que la componen a batir las fuerzas chilenas que atacaban, y superando las dificultades y escabrosidad del terreno, se verificó una ascensión por puntos casi inaccesibles con toda la rapidez que requería la gravedad de las circunstancias.
Una vez posesionados y dominando las cumbres de los cerros, se rompieron los fuegos, y comprometido el choque, la división a que pertenezco avanzaba intrépida y sin vacilar hasta que llegó a imponer al enemigo, haciéndolo retroceder, contando para ello con la valiosa cooperación de los denodados regimientos Dos de Mayo y batallón Zepita núm. 2 de la segunda división.

Me sería, a la vez que imposible, estéril hacer comentarios ni entrar en apreciaciones sobre tan brillante jornada; imposible, porque lo brusco y repentino del ataque dio como consecuencia inmediata que los cuerpos pertenecientes a esta división atacaran también por diversos puntos, diseminándose con tal motivo; y estéril, porque tanto el benemérito señor General en Jefe del ejército como V.S. se encuentran persuadidos del patriótico comportamiento de la división citada, desde que con el valor guerrero que les caracteriza y con el entusiasmo que anima a todo pecho que late a impulsos del patriotismo, recorrieron la línea de derecha a izquierda en las horas de peligro, dictando las disposiciones que exigía lo apremiante de la refriega. Así, pues, me limito tan sólo a adjuntar los partes que sobre tan espléndido hecho de armas me han dirigido los primeros jefes de los cuerpos de la división, que en conjunto han sufrido las pérdidas de 1 jefe, 8 oficiales y 124 de tropa muertos, y 5 jefes, 7 oficiales y 131 de tropa heridos.

Por lo demás, benemérito señor coronel, réstame tan sólo y cumplo con el deber de recomendar a V.S. al coronel graduado don José Félix Silva, a los tenientes de guardia nacional don Manuel Francisco de los Ríos, don Francisco de P. Ramírez y don Marcos Elías Sotillo, el cual se encuentra gravemente herido en esta ciudad; al teniente graduado de ejército don Abel de la Cuba y a los subtenientes de guardia nacional don Vicente Pacheco y don Guillermo Velarde, pertenecientes a esta comandancia general y Estado Mayor, que, como buenos peruanos y patriotas, cumplieron con su deber, guiados, sin duda, por la sublime emulación crecida al ver el arrojo de sus compañeros de armas y al contemplar la grandiosidad de la causa que defendían.

No concluiré sin felicitar a mi patria y al país por tan fausto triunfo, lamentando a la vez que la victoria se haya alcanzado perdiendo tantos valientes y deplorando que el valeroso y digno comandante de la división, señor coronel don José Miguel de los Ríos se encuentre gravemente herido. Incesante y audaz recorría de un punto a otro la línea que le competía en la extensión que le era posible, infundiendo con su arrojo, ánimo y valor a sus soldados y desafiando con denuedo al enemigo para arrancarle los laureles de la victoria.

Dios guarde a V.S., benemérito señor coronel.
BALTAZAR VELARDE.

Al benemérito señor coronel, Jefe de Estado Mayor General.

****************
Imagen, cómic peruano sobre la batalla de Tarapacá

Saludos
Jonatan Saona 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario