27 de mayo de 2015

Parte de Aliaga

Foto del estudio "Rodrigo y Cía" de Tacna
Parte de Claudio R. Aliaga, médico boliviano, sobre la batalla del Alto de la Alianza

"Lima,  27 de junio de  1880.
Señor Presi­dente:

... La Ambulancia comenzó su misión en el campamento de la Alianza con el recibo del primer herido por un casco de bomba: el capitán del «Cazadores del Misti» don N. Vera, habiéndose procedido a la amputación de la pierna derecha en el mismo campo de batalla con la asistencia del doctor Bertonelli.  Luego nos dirigimos, como prescribe el  reglamento de  ambulancias, a la línea de batalla con el señor Muñiz y cinco sanitarios con dos camillas y una  mochila de curación, llegando a colocarnos a la derecha del «Zepita» en momentos en que el  cuerpo del ejército estaba próximo a entrar en batalla

Rotos los fuegos por este batallón y vién­donos envueltos por los enemigos, retro­cedimos hacia nuestra carpa donde ya se en­contraban varios heridos recogidos por los demás sanitarios.  Obligados por  la rápida aproximación del enemigo, trasladamos a la ambulancia boliviana a los que nos fue posible, siendo  asistidos  allí por todo el cuerpo médico de nuestro aliado. Posterior­mente al ocupar el enemigo el campo de batalla nos dirigimos con el señor Muñiz y tres sanitarios  a la zona que antes era operada por nuestro ejército: lo hicimos custo­diados por dos soldados chilenos que nos dio un señor a quien habíamos conocido en San Francisco. Ya desde ese momento andábamos maquinalmente abatidos por el dolor que con cada paso aumentaba en su intensidad; entramos a nuestra carpa y los pocos heridos que anteriormente no pudie­ron ser trasladados a la ambulancia boliviana ya habían sido ultimados; sus cadáveres se hallaban entre el destrozado desorden de la ambulancia; los botiquines rotos y sin la mayor parte de los envases. Las camas y los víveres habían desaparecido, las camillas estaban rotas y la bandera de  la Cruz Roja envuelta en tierra.

Continuando la línea de batalla  preguntamos a los soldados chilenos en la dirección que dejaban a nuestros heridos; uno nos contestó «ya no tienen pues heridos». Más adelante otro nos dijo: «Ya no encontraran a ninguno, hemos tenido orden de matar a todos». Estas confesiones las creíamos bur­las sangrientas y crueles pero a poco con­templamos una horrorosa realidad; ni un herido nuestro, sólo cadáveres. Muchos de ellos, en particular de los jefes y oficiales tenían los rostros desfigurados, partidos unos por la boca y otros por la frente, algunos con balazos en los ojos que habían sa­lido de sus  órbitas;  los  más, desnudos de sus uniformes y varios hasta de la ropa interior; en cuanto  a los soldados, sus bolsi­llos sacados afuera indicaban que habían pasado por allí «los traperos de la muerte». Hay que  hacer notar que los cadáveres se encontraban denegridos por los balazos que  recibieron  los  heridos  a  boca de jarro.

Tocamos con la línea del enemigo chileno encontrándonos entre  los cadáveres y  heri­dos del batallón «Coquimbo». Debo hacer constar que para gloria del batallón «Zepita» y de la Nación que sus soldados estaban mezclados una cuadra adentro del terreno ocupado por el «Coquimbo» con los muer­tos y heridos de éste; a la cabeza de los su­yos estaba el Comandante Llosa y junto a éste su ayudante el capitán Chacón.

Nos ocupamos de curar a los heridos del men­cionado batallón chileno así como a algunos de los regimientos «Esmeralda», «Santiago» y «Valparaiso» hasta la seis de la tarde hora en que nos retiramos, agotadas las hilas y las vendas...
  
(firmado) 
Claudio Aliaga."

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Texto del documento tomado del artículo "Claudio R. Aliaga" escrito por Dr. Luis Hurtado Gómez, y publicado en "Archivos bolivianos de la historia de la medicina" vol 6, enero 2000.
Foto tomada del libro "90 años sembrando humanitarismo, Historia de la Cruz Roja Boliviana 1917-2007" 

Saludos
Jonatan Saona

7 comentarios:

  1. La Infausta Guerra financiada por Inglaterra, si NO hubiese sido asi,otra hubiese sido el "cantar" que los chilenos hoy estuvieran lamentando!!

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    1. Chile peleo la GP con el presupuesto NORMAL de la nación. Las arcas fiscales se vieron enriquecidas por gran cantidad de salitre peruano listo para embarcar. No se recibió una libra esterlina de Londres.

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    2. Un mito. Si no esta de acuerdo que es un Mito para justificar la derrota en el campo de batalla, fundamente su respuesta.

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  2. Juan Carlos Giancarlo ...pero el triste cantar fue para los peruanos...En la guerra del pacifico,y en la guerra Confederación Perú-Boliviana.Ni hablar cuando fueron derrotados en la guerra del Cenepa,por el gran ejercito Ecuatoriano

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  3. Hasta ahora lamentan los rotos que un puñado de peruanos semidesarmados se parara en frente de ellos a defender lo suyo, cuando en esos mismos años chile entregó el culo a los ingleses y la patagonia a los argentinos.

    Les arde ser un pais sin glorias resignados a celebrar cobardías.

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    1. sr? anónimo. Desarmados? En Arica 6.000 hombres defendieron Arica, contra 3 regimientos y ...perdieron el Morro!.Y eso que subieron SOLO DOS, en 55' !!!. La Patagonia se entrego porque en ese entonces carecía de valor. Nuestros fusiles fueron belgas y franceses. Salu2

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    2. Lo de los 55 minutos es un mito cómo el que más, los primeros tiros se escucharon a las 6:30 y la bandera peruana se arrió a las 8:00

      ¿Sabes que no todos estaban en el morro? Los peruanos contabilizabamos
      1858 hombres en total, de los cuales 1690 estaban dispersos (importante) en varios fuertes, mientras que el 3ro y el 4to de línea contabilizaban por si solos 1994 hombres.
      Pero ahora viene lo interesante, porque en el Fuerte Ciudadela habían 587 hombres, contra los casi 2 regimientos que se le venían encima!
      Y así en cada fuerte, el caso más extraño es el del Fuerte San Jose, donde sus 72 defensores fueron atacados por el Regimiento Lautaro... ...DE 1000 HOMBRES

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